El paisaje de la reserva natural que rodea a Carlsfeld puede disfrutarse plenamente tanto en verano como en invierno.

Durante el verano se puede pasear por un gran número de senderos, mientras que en invierno, debido a la nieve, solo quedan accesibles algunos de ellos especialmente acondicionados.

Una maravillosa e inolvidable experiencia son los paseos en trineo tirado por caballos atravesando los parajes nevados.